Este queso manchego mexicano, inspirado en el tradicional queso de La Mancha, se elabora con leche de vaca y presenta una maduración que puede durar desde 30 días hasta dos años. De forma cilíndrica, con un diámetro de hasta 22 cm, su corteza dura y pasta homogénea de color blanco a marfil le otorgan un sabor suave y ligeramente ácido. Perfecto para disfrutar en tapas, ensaladas, o acompañado de frutas y pan negro. Su versatilidad lo convierte en una excelente opción para maridar con vinos tintos.
Recomendaciones generales:
*Mantener en refrigeración.
*Temperar 1 hora antes de consumir.
*Guardar el producto en refrigeración dentro de un contenedor.
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